La esencia del ser humano

La existencia del hombre, se nos muestra envuelta en un manto o mortaja indivisible e irreconocible hacia nuestra propia realidad y semejanza.
La capacidad intelectual y fantástica del individuo se detecta en los propios cromosomas de éste.
La incapacidad de auto insuficiencia lo liga a un ser supremo llamado Dios. ¿Es que acaso con la gran capacidad de auto dirigirse nos es capaz de regirse por sus propias leyes?, ¿Es que el ser humano no se siente digno de sí para vivir sin un ser superior a quien venerar ?, ¿Es que acaso sus leyes son todavía ignotas por su propio ser?, Bueno, se barajan diversas hipótesis filosóficas de esto, como es la simple pregunta del porque un ser superior, que se encarna en nuestra misma forma, es digno de la alabanza universal, o simplemente del porque aquellas personas que lo alaban constantemente no tienen una vida digna en algunos casos.
En fin diversas opiniones que se nos manifiestan a diarios, desde la más simple y la más perversa para algunos.
Porque si una persona se atreve a decir que Dios no existe es juzgada despiadadamente por sus pares, será que al ser humano le faltan años de evolución todavía para enfrentarse a una supuesta realidad que atente y amordacen sus principios entregados de generación en generación, de sus antepasados hacia a Él.
La gran pregunta es, ¿Qué pasa si el ser humano se entera de que ese ser supremo que tanto deseaba y adoraba no es mas que una farsa del mismo para satisfacer una necesidad de consumo y auto superación, al no sentirse capaz?, ¿Es que acaso el ser humano no es digno de elegir su propia vida?, Porque aunque no lo reconozcamos, el ser humano es inteligente, lea dado nombre a las cosas que conviven diariamente con nosotros, o no nos hemos preguntado del ¿porque la mesa se llama mesa y no tiene otro nombre?, La respuesta es sencilla, porque el mismo hombre le dio su significado.
Se nos da a conocer a diario de que el hombre es inferior a ese ser supremo, pero ¿Podríamos decir que ese ser supremo también fue creado por el hombre?, Muchas personas se asustaran por lo dicho, acusándolo de hereje, pero es parte de un estudio que se nos da a conocer, pero ¿porque esta afirmación tan atroz? Su porque es sencillo, ya que la hipótesis planteada es que el ser humano no acepta su propia inteligencia, por lo que tiene que derogar sus intelectos a un ser superior, que podría ser creado por este mismo y divulgado hacia sus semejantes, o no nos llama la atención la cantidad de dioses griegos que inventaba el hombre para venerar y adorar, que hoy en la actualidad no existen e incluso nos parecen graciosos por la diversidad de seres supremos.
Podemos sacar en conclusión de que el ser humano no puede dejar de venerar a un ser que siente que es superior que su propio creador, por su grado de inferioridad ante cualquir situación.
Se nos da a conocer a diario, un mundo onírico e indivisible, llamado paraíso, que pareciera ser la salvación de los hombres, algo extravagante para la creencia científica, pero popular en nuestro entorno. Un mundo en donde predomina la paz y alegria, eso se nos da a conocer, y el predominio y amor del ser superior que adoramos. La misma creencia divulgada en la tierra se enfrenta a diversas contradicciones, como es que solo los limpios de alma, que han venerado al ser supremo, tienen la posibilidad de llegar a este mundo, pero a la vez se nos da a conocer que todos tenemos la posibilidad de llegar a este, incluyendo a los no protestantes de la Fe, ¿Entonces para que vivir venerando a ese ser supremo, si vasta con el arrepentimiento agonizante del día del juicio para llegar a dicho paraíso?.
Otra gran pregunta es el porque de la existencia esencial y mística de nuestro ser, ¿Porque vivir para luego morir?, todos sabemos que la vida es un proceso de evolución biológica y sicológica del ser humano, auque tratemos de evitarla, suprimiéndola de sus etapas el camino no conduce a la muerte, pero ¿Cual es el porque de nuestra existencia?, muchos personajes dejan plasmados sus nombres en la historia, para bien o para mal, o ¿que hubiera sido del mundo sin Hitler?, ¿Sin Einstein?, ¿Sin los grandes científicos que dejan su nombre destacado en la historia?, ¿Sin los monarcas de nuestra historia?, la respuesta suele ser sencilla, no existiría la propia esencia del ser humano, no existiría hitos que adorar, y mas allá no existiría un Dios a quien adorar, ya que todas los hitos de la historia están puestos con una eventual decisión del destino que imposibilita su derogación, ¿Acaso nosotros podemos o tenemos el don de olvidar los sucesos de genocidio ocurrido a lo largo de nuestra historia?, la respuesta es que no podemos ya que somos seres inteligentes, pero todavía algo ingenuos para afrontar nuestra propia realidad, por lo que recurrimos a la ayuda indivisible de un ser superior a nosotros para afrontar nuestro futuro sin repercusiones.

En este mundo traidor,
nada es verdad ni mentira,
todo es según el color
del cristal con que se mira.

Fragmento de Campoamor